¡QUÉ MASACRE!…El golero ENRÍQUEZ ‘regalado’ por su DEFENSA. PALMEIRAS HUMILLÓ a CRISTAL, con baile y MEDIA CAJA DE GOLES, para recordar la COPA LIBERTADORES

Por Luis Daniel Córdova

Últ. actualización: 29 mayo, 2025 19:41

Luis Daniel Córdova

Papelón, humillación, vergüenza, pesadilla, llámelo como quiera. La goleada del Palmeiras 6-0 sobre Sporting Cristal, es la bochorno más grande de la historia rimense en Copa Libertadores de América. Por eso sus hinchas hicieron sentir su bronca, contra Joel Raffo y los dueños del club: Innova.

La catarata de goles del Verdao fue producto de la timidez y horrores del sector defensivo. Obivo, de mitad de cancha perdían el balón como jugadores principiantes y Palmeiras a ritmo de Estevao, bailaron samba en el Allianza Parque.

No hay que hacerse el ‘loco’ cuando se pasa vergüenza o se hace un papelón gigante. Lo de Sporting Cristal quedó como la noche negra del fútbol peruano. Y nos compete a todos. A los hinchas de Alianza, de la U y del fútbol peruano. Aquí no hay que hacerse los coj… al decir “yo no soy de Cristal”. Acá hay culpables, como también soluciones.

‘Canchita’ González el llamado a gestar fútbol fue neutralizado desde el inicio del compromiso.

Mi padre me enseñó que nunca se debe hacer leña del árbol caído. Ya está. Ya fue como dirian en el barrio. Fue un 6-0 que llega hasta el alma. Un tropezón inmenso y ojo que pudo ser mayor. Pero dónde está el problema?.


En la conformación del equipo. El bloque defensivo es un desastre. Paulo Autuori es responsable de parar el once pero los dueños del club de contratar jugadores. Les falta olfato de técnico, pensaron en el “negocio” y no es hacer feliz al hincha. Se dedicaron a jugar o traer los jugadores que representan y darles rodaje para venderlos en el futuro.

Jugadores del Palmeiras dejaron un polémico mensaje en los camarines.

Qué hay improvisación, la hay y zapatero a sus zapatos señor Joel Raffo y gente de Innova.
Cómo diría Carlos Bilardo, los equipos se arman de atrás para adelante. Tienes un gran arquero, que evitó hasta un 10-0 fácilmente ayer ante el Verdao, pero falló en uno, cerca a su palo. Pero dio bronca verlo sufrir tanto y regalado con papel de Navidad por sus defensores.


Falta una defensa sólida, ruda y fuerte. Que raspe, que no deje pasar ni las moscas. Tenías a Ignacio y lo vendiste al mejor postor. Se les fue al Fluminense, el mejor zaguero brasileño de los últimos años. Ya no hay zagueros como Rebosio, impasible. Traes un tal Franco Romero y sigues intentando con Nicolás Pasquini, cuando no dan más. Es decir, dos cupos extranjeros perdidos por las… Y ayer el chico Alcedo y Chávez no defendian a nadie y le ganaron siempre las espaldas. Los laterales, ni que decir. No hay un ida y vuelta o una zurda perfecta como Ñol Solano.


En la volante, no hay magia, ni inspiración. No hay equilibrio en marca o un volante que se coma la cancha. Ayer errores en servicios eran aprovechados como puñales por los jugadores del Palmeiras. Además, Cristal tiene jugadores trotones, ya cansinos, con pecho congelado, que viven de la “chapa” cuando buscas un presente diferente. Falta velocidad. Obreros que muerdan a los rivales y que hagan magia con el balón, que encaren, como en algún momento la hacia el “Chorri” Palacios. La ausencia de Cazzonatti y de Yotún hizo decaer demasiado al equipo. No hay lideres en el campo. Y solo tienes la buena pegada de Távara, en pelota parada. No hay más.

La despedida de Estevao, que ya firmó por Chelsea, fue por todo lo alto.


Arriba, la lesión de Santiago González perjudicó. No tenerlo en el once es una gran necesidad porque falta versatilidad, desequilibrio por fuera para que Martín Cauteruccio pueda anotar. Fernando Pacheco fue neutralizado y presa fácil del fondo brasileño.


Amigo celeste, bajopontino o rimense, no sufra más, que no hay mal que dure 100 años.
Sé que este remedo de equipo, no es Cristal. Acá hay intereses que no lo hacen feliz, que no lo ayudan a inflar el pecho de alegria, como en los viejos tiempos. Este Cristal no es la Fuerza Vencedora Subcampeona de América que dio alegrías al Perú, pero tiene su gente, su hinchada que puede levantar y recomponer esta historia que terminó en pesadilla copera.