Luis Daniel Córdova
Si el City se sacudió de una crisis de resultados, este United ha entrado en un sótano sin salida. Nueve partidos con el técnico Amorim y ha perdido cuatro. Su última derrota se cuajó en la primera media hora de juego. Su equipo, inoperante, apenas fue un juguete en manos de un Newcastle United que se divirtió en su último partido de 2024. Fue 0-2 para las ‘Urracas’ para silenciar Old Trafford. Una debacle. Otra más.
Los red devils no se presentaron al duelo. No aparecieron. Y las urracas jugaron con confianza y comodidad. Tan superiores que apenas necesitaron cuatro minutos para abrir el marcador. Casi sin esforzase. El sueco Isak solo tuvo que poner la cabeza para rematar un centro medido de Hall desde la izquierda. Era el 0-1 del golpe.
Desde allí llegó el segundo tanto también. Gordon centro y, la zaga del United mostró la misma pasividad que en el primer gol. Martínez no fue obstáculo ante la llegada de Joelinton, que se llevó al argentino por delante mientras ampliaba la ventaja visitante. Se desesperó Old Trafford. Frustrado. Abucheando a sus jugadores. Se enfadó también Amorim, que decidió hacer el primer cambio a los 32 minutos. Justo antes, el colegiado había anulado un tanto de Isak por fuera de juego, y Tonali había disparado contra el poste desde la frontal del área pequeña. Inoperante hasta entonces, el equipo de Manchester trató de reaccionar. Sin éxito. Lo intentaron Hojlund y Casemiro antes del descanso, pero sendos remates salieron desviados. Demasiado pobre.
Demasiado fácil para el Newcastle. Maguire fue quien más cerca estuvo de meter nuevamente a los red devils en el partido, pero su cabezazo en el minuto 59 dio en el palo. No ofreció nada más el equipo de Amorim, que se acerca peligrosamente a los puestos de descenso. Siete puntos los separan del Ipswich Town. Y diez del Newcastle, en la frontera con los puestos europeos. Las ‘Urracas’ conquistaron Old Trafford, con buen fútbol, paciencia y efectividad.