Luis Daniel Córdova
Neymar volvió con su magia y sigue brillando con luz propia en el Santos de Brasil. Después de estar un mes sin jugar por lesión, el líder y estrella de Santos volvió a lo grande en el amistoso contra Deportivo Ferroviária, que terminó con victoria por 1-3. Un gol de penal y una asistencia fueron firmados por el exjugador del PSG. También debutó el hijo de Robinho.
Con trenzas en el pelo y una sonrisa en el rostro, Neymar volvió a sentirse cómodo, fresco y con esa energía que le caracteriza. Se presentó ante la afición local en un partido que terminó antes de tiempo, debido a que el árbitro lo dio por concluido en el minuto 86 tras una invasión de campo.
Santos se adelantó con un gol de Neymar desde los doce pasos y otro de Guilherme con asistencia del capitán brasileño. Desportiva recortó distancias con un tanto de Mariano tras un error defensivo. Ya en la segunda mitad, Pituca sentenció el amistoso con el tercer gol, tras la primera asistencia de Robinho Jr., que dejó buenas sensaciones en su estreno con el primer equipo.
El amistoso contó con el debut de Robinho Jr, hijo del ídolo del Santos, debutó con el primer equipo del Peixe a los 17 años, vistiendo la camiseta número 7 de su padre, quien actualmente se encuentra en prisión.
Neymar revolucionó Brasil. Su fichaje por Santos, con actuaciones que fueron de más a menos -con gol olímpico incluido- recordaron en algún momento al prodigio que un día puso rumbo a Barcelona. Entre el furor que generó el capitán de la canarinha, emergió la figura de Robson Jr, hijo de Robinho, exfutbolista del Real Madrid. El joven jugador de las inferiores del Peixe comaprtió varios entrenamientos con el ‘10′.

Robinho y Neymar también coincidieron en el Santos y en la selección brasileña. Cuando aún militaba en las filas del PSG, el crack brasileño confesó que siempre había idolatrado a Robinho. “Mi ídolo siempre ha sido Robinho. Desde que soy pequeño siempre me ha apasionado todo lo que hacía y siempre quise ser como él”, dijo en la presentación de DAZN en Francia. Ahora, está actuando como el mentor de su hijo, al igual que el padre lo hizo con él. Una unión que se observó desde el primer entrenamiento de Neymar en el Rei Pelé.