Luis Daniel Córdova
En Barcelona no se negocia el profesionalismo, puntualidad, ni responsabilidad. El gran momento del Barza de Hansi Flick se basa en eso y el deseo del jugador de entregarse al máximo y sudar la camiseta.
En España están sorprendidos de la respuesta y los grandes resultados obtenidos por Barcelona, consideran que fue lo más acertado para el actual líder de la Liga y el club de las goleadas en cada partido que disputa.
Hansi Flick ha revitalizado al Barcelona. Los jugadores han entendido su planteamiento futbolístico y rinden a un gran nivel, entre otros motivos, según ellos mismos han desvelado, porque ha logrado que aumenten su autoconfianza y ofrezcan su mejor versión. Pero lo ha hecho desde la disciplina. Con una fuerte disciplina. De hecho, el preparador se ha mostrado inflexible en algunos aspectos.
Uno de los temas que no admiten negociación o discusión posible para el técnico germano es la puntualidad. Ahí es firme y no tolera ningún tipo de relajación, ya que lo considera un valor fundamental a nivel personal y profesional. Los jugadores del Bayern de Múnich y de la selección alemana ya habían alertado a los futbolistas culés sobre esa exigencia. Pedri reconoció hace unos días esa severidad con los horarios . «Directamente, si llegas tarde no juegas», comentó el internacional en un programa español.
La inflexibilidad del preparador con la exactitud en relación a sus mandatos con el tiempo es máxima, como desveló Pau Víctor, en las últimas horas, en una entrevista en Xapa La Ràdio: «Cuando él puso las normas, yo aún no estaba, pero ya las vi al llegar y me advirtieron sobre qué tenía que vigilar. Es muy estricto con la puntualidad, si dice a las 11 en el campo y llegas tres segundos tarde para él has llegado tarde».
A Flick tampoco le gustan las relajaciones en relación a la planificación del trabajo. Tras la goleada en el Clásico, los jugadores pidieron tres días de fiesta. Pero el germano les dio dos, como tenía programado. Se ejercitaron el domingo, y descansaron lunes y martes, como estaba previsto.
Pese a su fuerte disciplina en muchos temas que él considera básicos para lograr el éxito, el exseleccionador germano también se muestra como una persona próxima y accesible a los jugadores. «Es un tío muy cercano. Tiene las ideas muy claras y como alemán es recto, sobre todo para los horarios, pero yo pensaba que era mucho más serio de lo que es. Sobre todo se preocupa por el que no juega, habla con él para que esté bien. Me sorprendió para bien», puntualizó Pedri.