Luis Daniel Córdova
Vasco da Gama de Coutinho le metió un baile al Santos de Neymar. Lo humilló e hizo que los hinchas del ‘peixe’ pidan cambio de estratega. Fue 0-6 para dejar sentado que el cuadro de Río de Janeiro quiere salvarse del descenso. Veinte años de amigos, con trayectorias triunfales en el aspecto económico. Neymar y Coutinho se reencontraron sobre un terreno de juego en el partido que midió a Santos contra Vasco da Gama en el Estadio Morumbi.
La amistad se dejó a un lado y lo visto en la cancha fue una demostración de fútbol y contundencia en el cuadro de Río de Janeiro, en el que Coutinho acaparó todos los focos con un doblete en la goleada histórica por 0-6 de su equipo. La afición del peixe perdió la paciencia ante la derrota en casa e incluso cantaron el nombre de Jorge Sampaoli.
Los dos brasileños no tardaron en dejar destellos de su calidad, aunque fue Lucas Piton quien abrió el marcador antes de los 20 minutos, tras un excelente centro de Nuno Moreira por la derecha. Ese tanto encendió a Neymar, que vio una amarilla que le impedirá jugar la próxima jornada contra Bahía. A Santos le anularon un penalti por fuera de juego de Guilherme. La primera parte fue equilibrada, con ocasiones en ambas áreas, con tres para Santos y cinco para Vasco.
Sin embargo, todo cambió en la segunda mitad, cuando el conjunto de Fernando Diniz desató un vendaval ofensivo con cuatro goles en apenas 10 minutos. David firmó el segundo, Coutinho el tercero y el quinto, y Rayan el cuarto. Una manita que se ampliaría antes del minuto 70 con el sexto gol de la noche, el de Tchê Tchê.
Coutinho salió vencedor en este primer duelo ante su viejo amigo Neymar, con una actuación brillante que contrastó con la impotencia del líder de peixe ante el poderío ofensivo de Vasco da Gama. Es la mayor derrota que ha sufrido desde que comenzó su carrera.
Coutinho estuvo bravo e imparable para Santos que nunca le ‘marcó’ la placa.
La afición del Santos terminó gritando “¡Qué verguenza!“ ante la pésima imagen de sus jugadores. También “¡Fuera, vagos, respetad a Santos, el mejor equipo del mundo!”. La grada incluso llegó a corear el nombre del Jorge Sampaoli, ahora sin equipo y querido por gran parte de la afición. Con este resultado adverso, Santos permanece estancado en la tabla del Brasileirão y cerca de la zona de descenso.