Luis Daniel Córdova
Manchester United confirmó que no tuvo rival en Semifinales de la Europa League, que su rival, Athletic de Bilbao no le hizo ni ‘cosquillas’. No fue rival para los dirigidos por Rúben Amorim. Fue 4-1 en los 90 minutos, un global de 7-1, lapidario y vergonzoso para el Ahletic. El United viajará a San Mamés el 21 de mayo con la Europa League como doble puerta del éxito: título europeo y puerta a la Champions.
Salvar la semifinal exigía épica. Jugar con el corazón en el once de Bilbao y la cabeza más fría que nunca para manejar la tensión. Sin embargo, pese al gol tempranero del cuadro español, no tuvo capacidad para aguantarlo o defenderse mejor. A los 31 minutos, Mikel Jauregizar abría la ilusión visitante en Old Trafford que duró hasta el minuto 71 de juego.
En el cara o cruz de la reanudación el Athletic se fue a por el United, al que metió en su área, aunque sin grandes ocasiones. La sensación del gol estaba más cerca del Athletic y eso provocaba desazón en los ingleses, a los que Amorim quiso corregir. A veinte minutos para el final el Athletic estaba a un gol de que su rival entrara en pánico. Pero marcó Mount. El 1-1 fue un puñal. A la vez que el gol Prados tuvo que retirarse por una dura entrada anterior de Lindelöf que el árbitro pasó por alto…Y podía haber sido hasta roja.
Sin tiempo para recomponerse y convertir lo que quedaba en una lucha por una victoria moral, que lo de pasar estaba más que imposible, el United hizo otros tres goles para destrozar a los de Valverde. Casemiro firmó la remontada de cabeza a los 79 y con el partido de las ilusiones ya destrozadas Hojlund firmó el tercero tras servicio de Daillo…y Mount el cuarto desde el centro del campo. En líneas generales, lo que empezó como un sueño terminó en pesadilla para el Bilbao desde el minuto 72 hasta la finalización.