El Real Madrid, muy sólido, sigue dando pasos hacia el título de Liga. Parecía complicado cumplir el objetivo de ganar los 11 partidos que restaban en el campeonato tras la reanudación, pero los de Zidane se han empeñado en convertirlo en realidad.
En San Mamés, uno de los estadios más complicados de la Liga, el líder sumó su séptimo triunfo consecutivo al transformar Sergio Ramos el penalti cometido sobre Marcelo.
La primera parte terminó sin goles. No fue por falta de ocasiones.
Tres claras tuvieron los visitantes, todas con Asensio como protagonista. En la primera, su lejano lanzamiento de falta en el 4’ fue rechazado por Unai Simón.
En las siguientes puso dos centros medidos desde la izquierda que ni Rodrygo ni Benzema pudieron aprovechar con dos testarazos que no encontraron portería. El Athletic, por su parte, también obligó a intervenir a Courtois con un remate de cabeza de Raúl García en el 17’.
No cambió el guion del encuentro tras el paso por los vestuarios. Transcurría muy igualado y apenas se pisaban las áreas hasta que Dani García derribó a Marcelo dentro del área en el 70’.
El árbitro del VAR avisó a González González, que tras acudir a la televisión para revisar la jugada indicó el penalti que transformó Ramos. El capitán volvió a mostrarse infalible desde los 11 metros y ya encadena 20 penaltis sin fallo.
Imbatidos por cuarto partido consecutivo
De ahí hasta el final, el Real Madrid demostró por qué es el equipo que menos goles ha recibido en la Liga y apenas concedió ocasiones al Athletic.
Pudo incluso marcar el segundo en el 88’ tras una gran combinación entre Benzema y Kroos, que obligó a lucirse al portero local en el mano a mano con el francés.
Cuarto partido consecutivo sin recibir goles para el líder, al que han marcado dos en los siete disputados tras la reanudación de la competición. Ya sólo quedan cuatro finales por delante.