Problemas para la Bundesliga: el Gobierno mantendrá los estadios sin público hasta 2021

Por J. M. Ancajima

Alemania ha decidido extender la prohibición de público en los estadios hasta 2021. Así lo ha decidido debido a la extensión del COVID-19, con una media de 1.500 casos nuevos diarios en el país. La situación recomienda ser prudente pero contraproducente para la Bundesliga.

La decisión ha sido recibida como un jarro de agua fría por los equipos de fútbol. Esperaban, al menos, poder contar con un aforo parcial en sus estadios de cara al inicio de la temporada 2020/21, con la Copa de Alemania prevista para el 11 de septiembre.

Aunque el gobierno planea permitir «excepciones» en regiones donde la tasa de infección haya sido baja durante al menos una semana. Y siempre que “se garantiza que los participantes provienen exclusivamente de esa región o regiones vecinas» donde también se contendría la propagación del virus.

La Liga Alemana de Fútbol (Bundesliga), en colaboración con la federación, había presentado un proyecto que permitía el regreso parcial del público a los estadios. Incluyendo entradas nominativas, facilitando la trazabilidad en caso de contagio.

El ministro de Interior y Deporte, Horst Seehofer, había declarado al periódico Augsburger que «la población no comprende que mucha gente puede moverse en un espacio reducido. Pero que no es posible un partido de fútbol con unos pocos espectadores separados». Avalando la tesis del retorno del público.

Pero el gobierno de Angela Merkel ha optado, ante el elevado número de casos, por ampliar la prohibición de asistencia a estadios, espacios culturales, festivales o ferias. A pesar de que la propagación del COVID-19 es «todavía significativamente menor que el pico alcanzado en marzo y abril, en las últimas semanas, el número de infecciones ha aumentado de nuevo».

Además, las autoridades fortalecerán los mecanismos necesarios para asegurar que se respeten los períodos de cuarentena. Y, en caso contrario, impondrán multas.