Pep GUARDIOLA con racha de SEIS partidos sin GANAR, se arañó el rostro de impotencia porque CITY se dejó empatar 3-3 con FEYENOORD.

Por Luis Daniel Córdova

Luis Daniel Córdova

La ausencia de muchos y muy importantes jugadores ha hecho que Guardiola pierda cinco partidos consecutivos por primera vez en su carrera como entrenador. La racha terminó con el empate ante el Feyenoord, pero el punto fue tan doloroso como cualquier derrota. Los ciudadanos ganaban por 3-0 superada la hora de juego y se vieron superados en los últimos minutos. Los de Róterdam marcaron tres veces en el último cuarto de hora. Pep Guardiola terminó autorasguñándose el rostro. Impotencia o desesperación, llámelo por usted quiera.

Tragedia por sorpresa. El City salió decidido, autoritario. Llegando con asiduidad a la meta rival y ahogando los esfuerzos del Feyenoord de salir con la pelota jugada desde atrás. Haaland y Foden tuvieron las mejores ocasiones en la primera media hora de juego, pero Wellenreuther se estiró para desbaratar ambas ocasiones. Luego crecieron los visitantes, que amenazaron con un disparo de Paixão que su compatriota Ederson atajó seguro. Le entraron las dudas a los de Guardiola, que dejaron de tomar riesgos en ataque y el partido entró en punto muerto. Hasta que Timber golpeó a Haaland en su intento por despejar una pelota dentro de su área. El noruego reaccionó más rápidamente, y luego abrió el marcador desde el punto de penal. Celebró el gol con rabia.

Pareció sentenciar el City en el inicio del segundo acto. Gündogan cazó una pelota suelta en la frontal en el minuto 50. Y, después de que su volea rebotase en Hancko, dobló la ventaja local. Apenas tres minutos más tarde, Haaland mordió nuevamente. Se lanzó al césped para empujar la pelota cuando Nunes avanzó por banda derecha y raseó el esférico al corazón del área. 3-0, y partido visto para sentencia. O no. En los minutos finales, los celestes acusaron el esfuerzo y cometieron una serie de errores que lanzaron por la borda su buen hacer previo.

Gvardiol permitió que Moussa se plantase ante Ederson, lo sortease, e hiciera que emergieran las dudas en el equipo inglés anotando el 3-1. Demasiado fácil. Otro fallo de Gvardiol terminó de hundir al City. Lotomba acomodó un balón al segundo poste y Giménez lo acompañó a la red con el pecho. El empate, en el minuto 89, se antojó inevitable. Ederson salió sin explicación de su arco y Paixão lo dejó atrás con facilidad. Hancko remató su centro a placer, con la meta vacía para disgusto generalizado en el Etihad Stadium. Guardiola no levanta cabeza. La peor racha negativa del técnico español. Seis partidos, con cinco derrotas y un empate, como para volverse loco, pero de impotencia.