El Consejo de Administración de la Juventus ha aprobado el proyecto de balance para la temporada cerrada el pasado 30 de junio de 2020. En el que se muestran unas pérdidas de 71,4 millones de euros, que se cubrirán utilizando la reserva para prima de emisión.
El campeón de la Serie A ha visto como sus ingresos se reducían muy significativamente. Han pasado de 612,4 millones en la 2018/19 a 573,4 millones en la 2019/20. Y han provocado que el club cierre de nuevo en números rojos, con un incremento de las pérdidas de 31,5 millones en relación a la temporada pasada.
Como era de esperar, los ingresos del día de partido y de merchandising han caído notablemente. Debido al parón provocado por la pandemia y a la reanudación de la temporada a puerta cerrada.
Aunque los coste interanuales han disminuido notablemente, de 458,5 millones a 414,1 millones de euros, no ha sido suficiente pero no ha sido suficiente para evitar el aumento general de las pérdidas.
Y las previsiones a corto plazo no son halagüeñas. La temporada arranca de nuevo marcada por el coronavirus, con el público apenas regresando a los estadios italianos hace una semana. Con apenas 1.000 espectadores en el amistoso entre Parma y Empoli.
Es una señal de la severidad financiera atribuida a la crisis de salud que el club ya está publicando un panorama financiero sombrío para el próximo año, a pesar de los numerosos acuerdos comerciales firmados durante la temporada 2019/20.