Luis Daniel Córdova
De la mano de Raúl Jiménez, Fulham se impuso 1-2 a Newcastle United por la jornada 24 de la Premier League. El delantero mexicano se mantiene en buen ritmo y marcó diferencia en su actuación en la liga inglesa, alcanzando así su anotación 56 en una de la competiciones más competitivas de Europa.
Marco Silva le volvió a dar la confianza al seleccionado mexicano, quien no decepcionó y jugó uno de sus mejores partidos en lo que va de la temporada. Corrió e hizo movimientos muy interesantes en la zona ofensiva de su equipo; se mostró participativos recuperando balones e iniciando jugadas de peligro de gol. Con este resultado, Fulham se queda en la novena posición muy cerca de la lucha por los puestos europeos.
Las ‘Urracas’ dirigido por Eddie Howe, saltó a la cancha con la intención de abrir el marcador desde los primeros minutos. Fulham aguantó los embates, con un par de atajadas de Bernd Leno, que estuvo atento y salvó en los primeros minutos a su equipo. El equipo donde milita Raúl Jiménez emparejó el partido y la posesión del esférico cayó un poco de su lado. Sin embargo, en un contragolpe el panorama cambió.
Al 37′, Gordon hizo una conducción magistral en un despliegue preciso por la banda; con una velocidad que fue dejando a los jugadores del Fulham sembrados llegó hasta el fondo y lanzo un centro que culminó Jacob Murphy para hacer estallar el grito de gol y poner el 1-0 antes de finalizar el primer tiempo.
El segundo tiempo fue más entretenido, el juego se tornó de ida y vuelta. Raúl Jiménez comenzó a orquestar los ataques junto Emile Smith Rowe y Alex Iwobi, tocando la puerta en varias ocasiones. El premio a esta propuesta ofensiva llegó muy pronto; al 61′, el delantero mexicano recuperó el esférico en campo propio y comandó la transición rumbo al arco contrario, tocó y acompañó la jugada para culminar un contragolpe magistral anotando un gol más a su cuenta.
Marco Silva decidió sacar a Raúl Jiménez y entró Muniz, que demostró que su entrenado nos se equivocó al elegirlo y al 82′ a balón parado tras un buen centro, sólo empujo el balón a las redes para concretar la voltereta definitiva.