Luis Daniel Córdova
Año Nuevo y rostro diferente para la City de Pep. Goleó y gustó con 4-1 ante West Ham, con doblete de Haaland, Foden y autogol de Coufal, sin dudas, sonrisa y felicidad en Guardiola, horas bajas en el cuadro de Lopetegui.
City salió con todo, como aquel triunfo del cierre del año frente a Leicester City. Sabía de la necesidad de convertir y festejar. Pese a que De Bruyne volvió a ser titular, y aún con Foden o Bernardo sobre el césped, quien tiró del carro fue Savinho. El brasileño marcó su primer gol con la camiseta celeste la pasada semana, e inició año asumiendo el protagonismo. Es el líder de la rehabilitación del City, que gana confianza además de puntos, aunque sigue fuera de los puestos europeos.
Y eso que el West Ham empezó mejor. Con Kudus generando peligro por la derecha. Insistió el ghanés, pero estuvo falto de puntería. Apareció entonces Savinho. En el minuto 10. Conduciendo por la izquierda, junto al lateral del área del West Ham. Amagando hasta sacar un disparo cruzado que Coufal quiso bloquear, pero que terminó mandándolo al fondo de su propia portería. Autogol para el 1-0 de Pep, Se deshincharon los visitantes, y los locales estuvieron apunto de doblar su ventaja. Superada la media hora de juego, Haaland ofreció un balón para la llegada de Bernardo. Areola, sin embargo, acertó a desbaratar la ocasión.
Savinho siguió a lo suyo. Generando oportunidades para sus compañeros. Lewis no pudo con Areola en el minuto 38. Cuatro más tarde, Haaland tuvo mejor suerte. Caracoleo Savinho, hasta encontrar el momento ideal para colgar un balón pasado. La pelota superó la zaga y también al portero rival, hasta alcanzar al atacante noruego en el segundo poste. Este puso la cabeza, y el 2-0 en el marcador. Golpeó dos veces más el City tras la reanudación. Marcó dos tantos en tres minutos para certificar la segunda goleada que encaja el West Ham en una semana, después de caer ante el Liverpool por 0-5.
Savinho y Haaland combinaron nuevamente en el minuto 55. El brasileño encontró espacio por el centro, enviando un balón que el noruego no desaprovechó. Con calma, picó la pelota ante la salida de Areola. Un mal pase de Kudus, apenas tres minutos más tarde, permitió el robo de De Bruyne y el tanto con el que Foden cerró el marcador antes de alcanzar la hora de juego. Despierta el City, no así un West Ham cuya una recompensa fue desquitarse marcando un tanto ya en el tramo final. Álvarez encontró a Soucek en el área, y este a Füllkrug, a los 71′ que batió bien a Ortega para el descuento. Un 4-1 lapidario.