Luis Daniel Córdova
Cristiano Ronaldo en lo más alto, siendo salvador de Al Nassr con un triunfo agónico en una semana que se presentaba complicada. Tras caer eliminado en la King’s Cup ante el Al Ittihad, los de Jorge Jesús se redimieron en liga con una remontada in extremis frente al Al Fayha (2-1). El portugués firmó un doblete, marcó el gol de la victoria de penal en el 102’… y lo celebró a lo grande, poniéndose una prenda árabe en la cabeza y bailando ante una afición rendida a sus pies. Sumó 952 goles en el objetivo de lograr los 1,000 festejos.
El partido arrancó torcido para los intereses del Al Nassr. En el 13’, el español Jason, ex de LaLiga, adelantó al Al Fayha con un toque de clase. Control con el muslo y picadita ante Al Aqidi. El gol despertó al Al Nassr, que dominó sin brillo hasta que apareció el de siempre. En el 37’, Cristiano Ronaldo cazó un balón filtrado por Coman y lo mandó a guardar con un derechazo cruzado. Empate y rugido del estadio.
La segunda parte fue un monólogo local, pero sin premio. Cristiano Ronaldo tuvo una clarísima en el 65’ y Coman rozó el gol en el 90’, mientras el Al Fayha resistía con orden y peligro al contragolpe. Pero el destino, una vez más, estaba reservado para el portugués.
En el 96’, una mano de Villanueva dentro del área llevó al árbitro al VAR. Tras revisar la jugada, señaló penalti. Silencio en el estadio. Cristiano Ronaldo tomó aire, engañó a Mosquera y puso el 2-1 en el 102’.
Riad estalló y el capitán del Al Nassr, exultante, se colocó una tradicional prenda árabe sobre la cabeza y comenzó a bailar ante la grada mientras sus compañeros corrían a abrazarle. Con el pitazo final se inició una pequeña tangana entre jugadores de ambos equipos fruto del penal cobrado en el último suspiro del choque que le do la victoria a los del jugador portugués.
