DORTMUND tuvo que APRETAR líneas para SELLAR el 4-3 ante MAMELODI que buscó el BATACAZO

Por Luis Daniel Córdova

Luis Daniel Córdova / Enviado Especial Estados Unidos

Borussia Dortmund practicamente ya tiene asegurado el boleto a octavos de final del Mundial de Clubes. Si bien es cierto el cuadro alemán sufrió más de la cuenta, supo amortiguar y aparecer en el momento justo para sellar el marcador. Un 4-3 ante Mamelodi de Sudáfrica que no estaba proyectado a ser tan ajustado. Y dramático por el cuadro sudafricano, que despertó muy tarde.

Aunque no de forma matemática, pero si virtual, la victoria de los alemanes ante un combativo Mamelodi les deja casi clasificado para las eliminatorias del torneo.

Y eso que a los de Niko Kovac les tocó remar al verse por detrás en el marcador  a los 11 minutos del duelo. Ribeiro arrancó desde el centro del campo y batió en el mano a mano a Kobel para adelantar a los sudafricanos. 

No aguantó mucho la ventaja el Mamelodi. Sólo cinco minutos después, en el 16′, el meta del conjunto africano cometió una pifia tremenda para regalar el 1-1 a Nmecha.

El Mamelodi tuvo la posesión y generó peligro arriba, pero se le vio algo menos fino atrás. Y claro, ante un gigante como el Dortmund eso se paga. El segundo de los alemanes llegaría pasada la media hora, cuando Guirassy se elevó ante la defensa sudafricana para poner el 1-2 con un buen testarazo. 

Uno de los protagonistas del partido, fue Jobe Bellingham. El hermano de la estrella del Real Madrid demostró su buen nivel futbolístico por el que el club alemán ha pagado una buena pasta por él, además de dejar claro que tiene gol. Se estrenó en el 45′, marcando su primer tanto como jugador amarillo. Controló con el pecho en el área y remató a la red para poner el 1-3 antes del descanso.

El hermano de Jude Bellingham hizo de las suyas y anotó su primer gol con Dortmund.

Jobe, además, disfrutó de su primer Mejor Jugador del partido con el Dortmund y de cómo la afición germana le cantó la versión del ‘Hey Jude’, ahora actualizada a un ‘Hey Jobe’ que retumbó tras el gol y al ser sustituido. 

Pese al resultado en la primera parte, el Mamelodi estaba poniendo en problemas a un Dortmund que veía cómo le costaba hacerse dueño de la pelota. Los de Niko Kovac saltaron en la segunda mitad con la intención de cerrar el partido con un nuevo gol, que lograron en el minuto 59. Se lo marcó en propia puerta Mudau, que no quería pero puso el 1-4 en el marcador. 

Sin embargo, 3 goles por debajo, el Mamelodi siguió a lo suyo. Dominando la pelota y atacando. No se rindió y sólo tres minutos después del 1-4 apareció Reyners para hacer el segundo tanto sudafricano, tras coger el rechace de un cabezazo suyo al palo. Y pudo marcar alguno más en las siguientes jugadas, con ocasiones de gol claras para poder volver a poner pimienta al partido.

El Mamelodi sabía que un gol le metía en el partido. Mientras, el Dortmund no se dio cuenta de eso y poco a poco bajó la intensidad. Los sudafricanos apretaron y, en el 90′, metieron el 3-4 y el miedo en el cuerpo de los alemanes. 

El tiempo añadido le hizo al Dortmund apretar los dientes mientras el Mamelodi creía en la paridad. No lo lograron los sudafricanos, pero dejaron una imagen tremenda ante uno de los grandes clubes de Europa.