Luis Daniel Córdova
Si es Bayern es bueno y lo resuelve de inmediato para no dejar dudas. El cuadro ‘bávaro’ liquidó 5-1 a Leipzig para meterse en la pelea de la Bundesliga.
En menos de una semana después de caer derrotado en su visita al Mainz (2-1) y permitirle al Bayer Leverkusen dirigido por Xabi Alonso ponerse a tan solo cuatro puntos en la tabla, el líder de la Bundesliga hizo sus deberes contra el RB Leipzig y se despidió al parón invernal con una victoria importantísima de cara a la tranquilidad durante las fiestas navideñas. Se impuso el conjunto dirigido por Vincent Kompany por 5-1 gracias a cinco golazos, obras de Jamal Musiala, Konrad Laimer, Joshua Kimmich, Leroy Sané y Alphonso Davies, ampliando de esta manera a un total de siete la diferencia de puntos con el conjunto de las aspirinas, a la espera de lo que hagan este sábado contra el Friburgo.
Kompany recuperó tanto a Harry Kane como a Davies, pero siguió sin poder contar con piezas clave como son Manuel Neuer, Kingsley Coman o Josip Stanisic. Más de lo mismo en la esquina sajona, donde Marco Rose se vio obligado a prescindir una vez más de titularísimos como Xavi Simons, Castello Lukeba o Amadou Haidara, por lo que tuvo que ser de nuevo el austríaco Xaver Schlager el encargado de nutrir de balones a Benjamin Sesko y Loïs Openda arriba. Muy a pesar de las ausencias: partidazo en toda regla para abrir la última jornada de la máxima competición alemana antes del parón invernal.
Ni siquiera habían transcurrido 30 segundos cuando Willi Orban se equivocó en la salida de balón, Kane proyectó a Michael Olise en el área y el galo le sirvió el primero en bandeja a Musiala. Fue un jarro de agua fría para un Leipzig que, eso sí, se sacudió en cuestión de segundos y le devolvió el golpe al líder un minuto después. Openda se deshizo en el carril diestro de Minjae Kim y le puso un centro a Sesko en el corazón del área que el esloveno, solo ante Daniel Peretz, sustituto de Neuer en el marco muniqués, no perdonó. Fueron los dos goles más rápidos en la historia de la Bundesliga.
Sin embargo, el Leipzig, lejos de tomar impulso del tanto, bajó una marcha y le cedió el esférico a unos bávaros que terminaron instalándose cerca del área visitante y, tras algún que otro aviso de parte de Musiala y Kane, dejaron el choque sentenciado antes de pasar por vestuarios. Una volea de Laimer, asistido nuevamente por el imperial Olise, y una obra de arte de Kimmich desde fuera del área provocaron que el Leipzig terminara el primer período noqueado y no volviera a levantar la cabeza en todo el partido.
Los segundos 45 minutos, excepto algún que otro muy tímido acercamiento por parte del RB, también fueron para un Bayern que, después de desperdiciar ocasiones clarísimas, terminó cerrando el 5-1 final gracias a la zurda de Sané y la cabeza de Davies tras un bellísimo centro de Kimmich que puso la guinda a un partidazo en el que Benjamin Henrichs terminó sufriendo una lesión que pareció grave antes de finalizar el compromiso.