Luego de un inicio accidentado, el Manchester City pudo remontar un 0-2 al Aston Villa para ser campeón en una jornada final de Liga inglesa de infarto.
Pese a que el Liverpool tuvo la ventaja al inicio de la jornada al empatar por 1-1 contra los Wolves. Los de Guardiola salieron de atrás y pusieron el marcador 3-2 contra los de Steven Gerrard. Cabe mencionar que fue uno de los peores partidos de la temporada para el conjunto cityzen: mucho toque y posesión, pero las ocasiones claras no llegaban sobre la meta de Robin Olsen.
Gundogan el savador del City
Gundogan cambió el rumbo del partido, pues desde su entrada el Manchester City logró marcar tres goles. El alemán abrió la cuenta de cabeza a pase de Sterling -otro cambio de Guardiola-. Rodri, desde fuera del área, puso el empate en el 78′ y en el 81′, marcó para dejar la Premier de nuevo en el Etihad.
Celebración del City
Los tres goles en cinco minutos generaron gran emoción en los hinchas, que no dudaron en invadir el terreno de juego del Etihad Stadium para celebrar junto a los futbolistas.