Luis Daniel Córdova
Barcelona se paseó por el Bernabéu y sentenció un 4-0 ante Real Madrid que quedará grabado en los libros históricos de los Clásicos de la Liga de España.
El equipo de Flick destrozó a su ‘compadre´ en media hora mágica para demostrar que en la actualidad es el mejor de Europa. Hizo cuatro goles y pudo hacer otros tantos. Real Madrid desconocido. Tocado por los dos primeros goles de Lewandoski y envuelto en dudas infantiles en el fondo. Salió muy tocado el equipo blanco y sale muy tocado un Kylian Mbappé que vivió una noche de pesadilla con continuas caídas en fuera de juego y fallos de cara a gol.
Dos goles de Lewandowski, uno de Lamine y otro de Raphinha ponen a los de Hansi Flick a seis puntos de distancia más una diferencia de goles que parece difícil de remontar. Es que la llegada del técnico alemán, el tercero de ese país en la historia del Azulgrana, ha devuelto la grandeza al Barça y la acción a los Clásicos.
El primer tiempo mostró el protagonismo de Real Madrid con el balón. Hubieron chispazos e ida y vueltas, fueras de juego y falta de efectividad en la definición con Kylián Mbappé con la pólvora mojada. Perdía frente al golero Iñaki Peña.
El francés estuvo bloqueado porque Hansi Flick trazó la línea defensiva del Barca a 50 metros de su golero Iñaki Peña. En 25 minutos había provocado siete off-sides del Madrid. El octavo acabó en gol anulado por una rodilla culpable de Mbappé. Es decir. La vida del Barça colgando del VAR a los 30′ por posición adelantada, en un duelo abierto. De ida y vuelta. Golpe a golpe pero sin que se mueva el marcador. Fue 0-0 con opciones de gol, en la primera parte, sin embargo, será el Clásico más abierto que se recuerde en el Bernabéu.
En el complemento, Barcelona le bajó la tensión al juego y empezó a tocar con Pedri más adelantado y el Madrid decayó en su primera presión, cometió dos errores graves de concentración. En el primero, Ferland Mendy se quedó enganchado y habilitó a Lewandowski, que recibió el pase vertical de Casadó y batió sin oposición a Lunin, era el 1-0. El inicio del desatre madridista.
El segundo, Baldé mandó un centro al área pequeña y ahí, con Militao y Rüdiger de brazos caídos, el polaco Lewandowski cabeceó a la red con comodidad. Un 2-0 que mostraba la efectividad azulgrana ante la torpeza madridista en el fondo. Con este doblete, Lewandowski sumó 14 goles en 11 partidos de la Liga, y dejó en claro que por primera vez le marcó al archirival en el fútbol español.
El tercero llegó a los 77′ y fue de Lamine Yamal, derechazo que dejó sin chances al golero ucraniano Lunin. El cuarto, fue del brasileño Raphinha a los 84′, quedó mano a mano con el golero madridista, a quién le levantó el balón para cerrar la goleada histórica del Barcelona ante un Real Madrid lleno de horrores fatales en el fondo.